martes, 31 de marzo de 2015

Ratas, valores y contravalores: Proyecto "Ciudad de Hamelín"


El proyecto “Ciudad de Hamelin” nace con el principal objetivo de fomentar con un grupo de alumnos de 1ºESO la responsabilidad y la constancia en el trabajo, así como el reconocimiento de la labor bien hecha y, por ende, la autoestima. Del mismo modo, pretendía ser una forma más de acoger al alumnado proveniente de primaria y hacerles sentirse importantes en nuestra comunidad educativa.





El proyecto está basado en la leyenda de “El flautista de Hamelin”. Durante el primer patio de los jueves, desde el mes de octubre hasta la primera semana de marzo, 19 alumnos escogidos entre chicos y chicas de 1ºESO se han estado reuniendo para almorzar, trabajar y conocerse más entre ellos. Allí dibujaron en cartulinas y recortaron 90 ratas negras que simbolizan actitudes negativas que pueden coartar los derechos del ser humano. Del mismo modo, recortaron 90 palabras grises (contravalores) y 90 palabras en color (valores que anulan las anteriores ideas negativas).

Durante la jornada cultural de Navidad, comenzamos a pintar un cuadro de 2x2
metros en el que se representa al flautista de Hamelin expulsando a las ratas de la ciudad. De su flauta salen los valores positivos que arrastran fuera del centro las actitudes negativas de nuestra sociedad. El mensaje que se desea transmitir es el de la importancia que poseen la Educación, la Cultura y el Arte a la hora de fomentar valores positivos en nuestro mundo.

Junto a ese cuadro, se pintó en otro un pergamino cuyo mensaje da la bienvenida a cualquier persona que visite el centro: “Educamos en valores para expulsar de nuestra sociedad cualquier actitud que coarte los derechos del ser humano”, seguido del nombre de los alumnos implicados.




Una vez acabadas las clases del lunes 9 de marzo, se procedió al montaje de nuestra instalación artística. Previamente, se había enviado un comunicado a las familias de los alumnos para informarles del esfuerzo que habían estado realizando sus hijos hasta ese momento así como la conveniencia de que reconociesen positivamente su dedicación en el trabajo. Del mismo modo, se les invitó a colaborar en el montaje de la exposición y, de hecho, varias familias se acercaron al instituto para, junto a sus hijos y los profesores que habían estado colaborando de distinta forma durante todo este tiempo,colgar los cuadros en la puerta del centro, organizar las palabras, distribuir las 90 ratas por los pasillos y las aulas como si de una auténtica plaga se tratase.

Sin duda, uno de los aspectos claves de este trabajo ha sido el de crear un efecto
de sorpresa en la comunidad educativa pues al regresar el martes 10 al centro se
encontraron con la inesperada instalación: el proyecto se había llevado en secreto hasta ese momento precisamente con esa intención. Esta ha sido, sin duda, una cuestión que los alumnos han valorado mucho y que les ha servido para sentirse motivados en el proyecto: ser los únicos conocedores de un trabajo que podría despertar el interés y la sorpresa positiva entre compañeros, padres y profesores.



La reacción por parte del resto del alumnado del instituto a la mañana siguiente fue positiva. Por un lado se mostraron extrañados ante la plaga de ratas y curiosos por averiguar el origen y significado de la exposición. Tras sacarles de dudas, los alumnos valoraron positivamente el esfuerzo realizado por sus compañeros de 1º ESO.

Resulta importante matizar que esta actividad no está inscrita a ninguna asignatura, y que los alumnos no van a recibir ningún tipo de compensación en sus notas, lo que dignifica aún más el esfuerzo realizado. A ellos se les pidió implicación, esfuerzo y responsabilidad y han respondido correctamente. La única recompensa recibida ha sido la de vivir una experiencia que no olvidarán.

Entre los objetivos que nos hemos marcado con este trabajo se encuentran:

• Valorar el esfuerzo, el trabajo en equipo y la constancia en la consecución de objetivos.

• Recurrir al arte como un aspecto transversal, fundamental desde cualquier asignatura.

• Levantar la autoestima en nuestros alumnos.

• Fomentar la convivencia en el centro.

• Analizar los valores y contravalores de nuestra sociedad.

• Reforzar el trabajo cooperativo entre profesores, alumnos y familias.

• Motivar a los alumnos para que participen en actividades que se propongan en nuestro centro.

• Valorar la igualdad entre el castellano y el valenciano, pues los 45 valores escogidos se presentan en ambas lenguas cooficiales.

Por otro lado, conscientes de que actualmente las redes sociales tienen un peso
importante en nuestra sociedad, especialmente entre los jóvenes, este curso hemos creado sendos espacios en Facebook y Twitter, con el único objetivo de trabajar la autoestima y valorar el esfuerzo de nuestros alumnos. Para ello, nos hemos propuesto subir únicamente noticias en las que se muestren el esfuerzo y los resultados positivos de nuestros alumnos y profesores.





Desde entonces son ya muchas las entradas que se han abierto y resulta interesante ver cómo alumnos, profesores y familiares, tanto actuales como de otros cursos académicos, han encontrado un punto común de encuentro y siguen las actividades que vamos realizando en nuestro instituto.

Este proyecto ha sido creado y coordinado por Raúl Aráez en colaboración con Noelia Serrano, Alise Sense, Beatriu Santonja, María Soro, Matilde Cuadrado, Anna Colomina, Ismael Montañés y José Antonio Corral,así como la colaboración de otros profesores, personal no docente y familiares de los chicos.




lunes, 30 de marzo de 2015

!Nuestras nueces bailarinas!


Este año tengo una clase con 24 soletes de 3 años, con los que me encanta experimentar. En infantil las estaciones del año son muy importantes, y se recuerdan a diario en la asamblea y en nuemerosas actividades.

Es por ello que el trimestre pasado se nos ocurrió uno de nuestras "probatinas", que os voy a contar a continuación.


 Como somos unos auténticos artistas y nos encanta pintar, un día decidimos probar a ver que salía si pintábamos con nueces!!!! Era la excusa udeal para trabajar con un fruto seco y podíamos aprovechar para hacer un cuadro del otoño si utilizábamos los colores propios de la estación.

Así que pensamos y acordamos cuales eran los colores del otoño: marrón, amarillo, rojo y naranja,no nos costó mucho porque como os digo lo recordamos todos los días y nos lo sabemos de requetemaravilla. Ya solo faltaba comprar unas cuantas nueces,


Para llevar a cabo nuestra obra de arte cogimos una caja del rincón de las construcciones que nos iba a servir como soporte para realizar nuestra obra de arte.




Y así en la asamblea, calladitos y muy muy atentos fuimos pasando uno a uno a hacer magia. Lo divertido de la actividad era, por una parte, que la caja era transparente y nos permitía ver el baile que llevaban las nueces y por otra, que además de las obras de arte en papel, nos quedaban unas nueces chulísimas pintadas a modo de escultura, más tarde os contaremos lo que hicimos con esas nueces.



Así, cogíamos dos nueces de la bolsa, las poníamos encima del folio que estaba dentro de la caja, la seño echaba chorretones de pintura de los cuatro colores del otoño y la cerrábamos.

Unos cuantos bailes y meneos a nuestra caja, cada uno con su estilo propio y,..... voila! Teníamos una obra de arte digna de cualquier museo.





Al principio con las nueces queríamos llevarlas a casa, pero luego la seño pensó que podían ser un muy buen material manipulativo para llevar a cabo actividades de conteo y asociación de grafía y cantidad, así que al final las echamos a un bote y ahora jugamos con ellas en la asamblea.